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HERMANO MERO & HERMANA CABRA

ALREDEDOR DEL MONTARDO

ALREDEDOR DEL MONTARDO

 Aunque no alcance la cota “mágica” de los 3.000 metros, el Montardo es una de las montañas más emblemáticas del Pirineo, y más concretamente del Valle de Arán. Meritos para ello no le faltan, por su imponente presencia sobre Valarties, la belleza de sus diversas vías de acceso, y lo espectacular de las vistas desde su cima… Y todo ello con una ascensión que, al menos sin nieve, presenta escasas dificultades. 

Por ello proponemos una ruta circular de varios días, que con la excusa de ascender y circunvalar esta montaña, nos permitirá conocer buena parte del Parque Nacional de Aigües Tortes y su zona de influencia, donde se encuentra la mayor concentración de lagos con origen glaciar del Pirineo y de la Península Iberica.

 

Tal como está aquí planteada la ruta tiene su inicio en Pont de Ressec, a donde se accede en coche desde Artiés, en el Valle de Arán, y tiene una duración de tres días y medio, haciendo noche en los tres refugios guardados de la zona; Restanca, Ventosa i Calvell y Colomers.

 

Ninguna de las etapas propuestas es larga, sino más bien al contrario, siendo los horarios indicados sin contar paradas, pero a paso tranquilo. Se ha pretendido que podamos ir relajados y disfrutando de los lugares por los que pasaremos, por lo que, dependiendo de nuestras ganas y fuerzas, la duración de este pequeño “tour”  podría reducirse, uniendo varias etapas en una (por ejemplo, uniendo la corta jornada inicial con la segunda), o incluso acortando el recorrido, y pasando diréctamente del refugio de Restanca al de Colomers, por el Puerto de Caldes (señalizado como GR11.18). Sin embargo de esta forma nos perderíamos el poco frecuentado Valle de Colieto y el Circo de Colomers, el de mayores dimensiones del Pirineo. Otra opción a tener en cuenta es la de tomar como punto de inicio el Embalse de Caballers, en el Valle de Boí, para lo cual deberíamos contar con dos horas y media  más, para acceder al refugio Ventosa i Calvell… En definitiva y como puede verse las posibles variantes son muy numerosas y evidentes, a poco que nos miremos el mapa.

 

Por último, y antes de comenzar con la descripción de la ruta, hacer dos pequeñas anotaciones:

  

Cada una de las etapas termina en un refugio guardado, por lo que podemos permitirnos el lujo de ir ligeros de equipaje y de comida... Eso si, cuidado con las fechas de mayor afluencia de gente (Julio y Agosto) y reservad antes de ir, o podeis encontrarnos con la sorpresa de no tener plaza, esta zona es de las más frecuentadas del Pirineo.

 

Y por otro lado... aunque las etapas sean cortas, como ya hemos dicho, procurad salir pronto; evitaremos las tormentas veraniegas de por la tarde... Y os aseguraréis la cena en los refugios, que suele ser bastante pronto (a las 7 de la tarde en la mayoría de ellos).

 

 

JORNADA 1ª.  PONT DE RESSEC – REFUGIO RESTANCA 

Duración: Entre 2 y 2 horas y media.

Desnivel acumulado: 600 metros aprox.

Dificultad: Sin nieve poca, pista forestal y sendero muy concurrido.

 

Croquis 3D. 1ª jornada

 

Desde Artiés, población a la que habremos llegado, si venimos desde el sur por Viella y su poco apto para claustrofóbicos tunel, debemos tomar la pista asfaltada de Valarties, Desde el mismo comienzo de este valle, y mucho antes de empezar a caminar, podremos disfrutar de las vistas sobre el Montardo, que desde esta vertiente es una mole bien definida, a modo de fortaleza coronada por varias agujas y puntas rocosas.

 

El coche debemos dejarlo en el aparcamiento de  Pont de Ressec, punto a partir del cual el paso está prohibido. Desde aquí, tenemos la opción de comenzar a andar o tomar un taxi todo terreno que nos lleve a Pont de Rius.

 

Cerca de Pont de Ressec, el Montardo

 

De cualquier modo debemos remontar los aproximadamente 3 km de polvorienta pista forestal hasta su final. Desde aquí, y antes de cruzar el puente que da nombre a este paraje, un sendero nos interna en el espeso bosque que nos acompañará hasta casi el mismo refugio.

  

El comienzo del sendero está indicado con un cartel de madera, y aunque al principio es algo confuso debido a la cantidad de atajos abiertos, al final se volverá más definido, introduciéndonos en una inclinada canal, encerrada entre dos paredes rocosas y cubierta de arbolado.

 

Subiendo hacia la Restanca.

  

El sendero asciende con fuerte pendiente pero con muy buen trazado, enlazando sucesivas zetas que nos ayudan a salvar el acusado desnivel. Una vez lleguemos al final de la canal veremos un profundo torrente que se abre a nuestros pies. El sendero, ahora con menor inclinación gira a la derecha, y en dirección sur nos lleva hasta el muro de la presa. Solo nos queda cruzarla para llegar al refugio de la Restanca (2010 m).

 

Refugio de la Restanca

 

 

 

   JORNADA 2. RESTANCA – MONTARDO – VENTOSA I CALVELL 

 

Duración: Unas 6 horas

Desnivel: 823 m.

Dificultad: Sin nieve media. Sendero muy concurrido incluso hasta la cumbre

 

Croquis 3D. 2ª jornada

  

Salimos del refugio  por un claro sendero señalizado con las señales rojas y blancas de GR, que va bordeando el lago en dirección este. A los pocos metros el camino se bifurca. Debemos despreciar la opción que se mantiene más cerca de la orilla. Al contrario, nosotros debemos ir ganando algura poco a poco, primero en una larga diagonal, y posteriormente en sucesivas zetas que nos van acercando a una caída de agua.

Prácticamente en el momento que nos ponemos a la altura del cauce, la pendiente se acaba y damos paso al Planell de Cap de Port, en cuyo fondo se encuentra un precioso lago de igual nombre. Sobre nosotros, al norte, las agujas del Montadro, y al fondo nuestro siguiente objetivo: El Collado de Guellicrestada.

Rodeamos el lago por la izquierda, en el sentido de la marcha y pronto el sendero vuelve a coger inclinación hasta introducirnos en una pedrera, que se supera sin problemas y de forma bastante cómoda. A nuestra espalda las vistas del Estany de Cap de Port con la Sierra y el Valle de Rius de fondo son cada vez más espectaculares.

Estany Cap de Port

Una vez en el Collado de Güellicrestada (2.483 m) podemos ver al otro lado el lago des Monges, y a nuestra izquierda la cara sur del Montardo. Para subir a la cumbre debemos primero perder algo de altura siguiendo por el sendero marcado como GR 11.18 y que se dirige hacia el Este (se trata del que se dirige a Colomers por el Puerto de Caldes), que abandonaremos al poco tiempo para atacar directamente la ladera de roca y hierba por algunos de los senderos abiertos por el paso de la gente.

 

 Lago des Monges y al fondo Punta Alta

  Subiendo al Montardo. Al fondo los Besiberris

Subimos la ladera con fuerte pendiente, pero de forma bastante cómoda, hasta alcanzar un colladito por el que accedemos a la cresta de la montaña (alomada y bastante ancha).

 Hacia el Collado del Montardo

  Loma y Collado del Montardo

  

Desde este punto podemos ver lo que nos resta de ascensión. Debemos seguir la cresta por un amplio sendero, desde el que se ve una pequeña laguñilla y llegar a un collado abierto entre la cumbre principal del Montardo y la aguja que parecía la cima desde el lado des Monges. Desde este collado, ascendemos, ahora con bastante mayor inclinación hasta el punto más alto de la montaña (2.833 m).

 

Lagunilla en la loma del Montardo

Cima del Montardo y la última cuesta.

  

Las vistas que nos esperan al llegar compensan el esfuerzo realizado; hacia el oeste, casi a nuestros pies, el lago de la Restanca, y algo más arriba el Lac de Mar, con el Valle de Rius y el macizo de la Maladeta con sus glaciares en último término.  Hacia el suroeste y sur, los Besiberris, la cuenca lacuestre por la que posteriormente bajaremos y cerrando el horizonte la impresionante Punta Alta. Hacia el este el mar de montañas es interminable, y finalmente inmediatamente al norte, contrastando con el color de la roca que nos rodéa, Valartiés y el pueblo que da nombre a este valle.

 

Restanca, Estany Mar y Maladetas

 

 En la cumbre, con los Besiberris al fondo.

 

Punta Alta desde la cumbre.

 

En la Cumbre. Vistas hacia el este. 

Valarties desde la cumbre.

Llegado el momento de abandonar la cima, retrocederemos hasta el Lago des Monges por el mismo camino que usamos en la ascensión.

 

Sin llegar a la orilla, tomaremos un sendero que sube un pequeño repecho antes de bajar hasta la orilla izquierda, la cual debemos recorrer, hasta que el sendero la abandona y gira, perdiendo altura, hacia el este.

 

 Bajando de la cumbre

 

El Montardo y Lago des Monges 

 

De esta forma llegamos al desagüe del Estany de les Mengades. Seguimos descendiendo junto al arroyo que baja del lago, hasta que lo abandonamos por la izquierda, pasando por varios lagos de menor tamaño, que preceden al Estany de Travessani. Las vistas de las agujas de igual nombre son en todo momento apabullantes.

 

Llegando al Estany des Mengades

 Estanys de Travessani y Punta Alta.

 

Agujas de Travessany 

Al fondo el Pa de Sucre

Estany Gran de Travessany

 Estany de Travessany y Pa de Sucre

 

Rodeamos el lago por la izquierda y pasamos por un último lago de pequeño tamaño. El sendero sigue por su desagüe, y encaramos el último descenso pronunciado del día. Por debajo de nosotros y a la izquierda ya se ve el Refugio Ventosa i Calvell (2.220 m), situado en un enclave de especial belleza, con el Estany negre a sus piés. Solo nos resta llegar al refugio, con una curiosa fuente en su puerta, para dar por finalizada la etapa de hoy.

 

Refugio Ventosa i Calvell

 

Estany Negre 

 

 

 

JORNADA 3. VENTOSA I CALVELL – COLOMERS

 

Duración: 5 horas

Desnivel: 385 m

Dificultad: Esta es sin duda la etapa más problemática en cuanto a orientación; dejaremos de lado las zonas más concurridas y nos internaremos en un valle, el de Colieto, poco frecuentado y con senderos no siempre claros, por lo que es recomendable andar atento al mapa, para saber en todo momento donde nos encontramos y hacia donde debemos dirigirnos.

 

Croquis 3D. 3ª jornada

 

Nuestro camino comienza por detrás del refugio, perdiendo poco a poco altura hacia el fondo del valle, donde podemos ver un pequeño laguito, el Estany de Colieto.

 

 Estany inferior de Colieto

 

El sendero se introduce en la incómoda pedrera que ocupa la margen derecha del valle. Conviene ir atentos a los mojones y estacas que señalan el mejor paso entre los grandes bloques de piedra, para, a veces cerca de la orilla, y a veces más altos, ir avanzando trabajosamente.

 

En un momento determinado cruzamos el curso de agua por un estrechamiento del mismo. A partir de este momento el sendero se hace notáblemente más comodo y gana altura hasta llegar al Estany Gran de Colieto, que debemos bordear por la izquierda, según el sentido de la marcha.

 

Valle de Colieto 

 

Valle de Colieto

 

Detrás del lago hay una gran pradera de donde parten tres senderos que cuesta trabajo localizar; a mano derecha el que sube hacia Punta Alta, rectos y siguiendo el fondo del valle, el que se dirige al paso de Contraix, la alta portilla que cierra el valle de Colieto, y algo más a la izquierda el nuestro, que subiendo por unas loma herbosas, se dirige hacia el Collado de Colomers.

 

Como pista para localizar el sendero diremos que por la izquierda de la pradera desemboca un riachuelo proveniente de los estanys altos de Colieto. Arriba y a la derecha de este riachuelo, que baja con bastante pendiente, existe un risco, por cuya ladera derecha remonta el sendero.

Una vez localizado el sendero, subimos por el hasta llegar al primero de los estanys altos de Colieto., que se rodea por la izquierda. Inmediatamente después subimos hasta un nuevo estany, más pequeño.

 

 Estany Alto de Colieto

 

En este punto el sendero no es nada claro, teniendo mojones por todas partes. Lo mejor es seguir todos los estanys hasta el noroeste, hasta localizar el amplio rellano que es la parte alta del valle de Colieto, de claro perfil glaciar.

 

Remontamos el valle, que pronto se convierte en una canal, bien por la pedrera que cubre su fondo, bien por un sendero más cómodo que existe varios metros arriba y a la izquierda, según el sentido de nuestra marcha (este sendero se puede tomar justo en el momento en que la canal se encajona).

  

 Parte alta del valle de Colieto

 

Con no excesivo esfuerzo, a pesar de la inclinación del sendero, llegamos a un rellano en el que ambos senderos se unen, para alcanzar en pocos minutos más el Puerto de Colomers (2.605 m), punto más alto de la jornada de hoy y que nos ofrece estupendas vistas.

 

 Puerto de Colomers

 

Comenzamos el descenso, primero hasta un pequeño rellano herboso y después por una canal pedregosa hacia el fondo del circo glaciar más amplio del Pirineo; el circo de Colomers, cerrado por diversos picos, entre los que destacan las moles del Gran Tuc de Colomers y el Tuc de Ratera.

 

Bajando hacia el circo de Colomers

  

El sendero abandona la canal, cada vez más difuminada, por la derecha y desciende por un hombro hasta el desgüe del Lac deth Port de Colomers. En este punto nuestro camino gira al norte y recorre toda la cuenca lacustre, pasando por infinidad de estanys de todos los tamaños.

  

 Bajando circo de Colomers.

 

Una vez superado un último lago de mayor tamaño el valle se estrecha y nuestro sendero pierde altura bruscamente. A nuestra izquierda el río proveniente de las lagunas se despeña en forma de cascada. Llegamos a un rellano y cruzamos el riachuelo. El sendero, que cada vez está más claro, continúa hacia el norte, alejándose del curso de agua, que bruscamente gira hacia la derecha y pierde altura hacia unos lagos que podemos ver más abajo.

 

Llega un momento en que también nuestro sendero gira a la derecha y se bifurca; un ramal se dirige hacia los mencionados lagos, y el otro, que tomaremos nosotros, toma dirección norte hacia el Estany Mort, que comenzamos a bordear por su extremo este hasta llegar al desagüe.

 

 Estany Mort 

 

Estany Mort 

 

En este punto cruzamos el escaso curso de agua y comenzamos a bajar con fuerte pendiente. Tenemos frente a nosotros el lago de Colomers,

El sendero no llega hasta la misma orilla, sino que pierde altura hasta que se introduce en una pedrera, que atravesamos hasta llegar al nuevo refugio, que entrará en funcionamiento previsiblemente en el verano de 2007. Si vamos antes de ese momento tendremos que continuar por el sendero hasta el viejo refugio (2.130 m), que será demolido próximamente y que se sitúa justo encima de la presa.

  

 

 

JORNADA 4. COLOMERS - PONT DE RESSEC

 

Duración: Entre 4 y 4 horas y media.

Desnivel: Unos 300 metros aproximadamente.

Dificultad: Si nieve ninguna; senderos bien marcados y pista forestal. 

 

Croquis 3D. 4ª jornada

 

Comenzamos nuestra última jornada abandonando el viejo refugio por el mismo sendero por el que llegamos, siguiendo las señales de GR 11, que nos acompañarán a lo largo de todo el día.

 

En una pradera herbosa el sendero se bifurca; un ramal (GR 11.18) se dirige hacia el Puerto de Caldes y de ahí a la Restanca, y otro (GR 11), el que a nosotros nos interesa, asciende hasta un pequeño collado desde el que podemos ver el tramo medio del valle de Colomers.

 

Nuestro sendero inicia un largo flanqueo por la ladera que cierra el valle por el oeste, perdiendo altura levemente. Atraviesa un par de espolones rocosos mediante tramos de camino armado que aprovechan sus puntos más débiles y pronto comenzamos a coger altura de nuevo.

 

Las sucesivas vueltas y revueltas del sendero se hacen monótonas y la ascensión por estos prados inclinados parecen interminable, aunque al menos, las vistas sobre los bosques y turberas del fondo del valle nos dan un respiro.

 

 Dejando atrás el circo de Colomers

 

 Revueltas sobre el valle de Colomers

 

Finalmente alcanzamos el collado de la Ribereta (2.323 m). Cruzándolo podemos ver el pequeño y escondido valle del mismo nombre, que tendremos que recorrer en su integridad.

 

El paisaje cambia radicalmente a partir de este momento;  frente a nosotros los farallones rocosos que se alzan sobre el Lac de Ribereta, el cual no podemos ver desde nuestra posición, aunque si los más pequeños lagos de Montcasau, por los que pasaremos posteriormente.

  

Lagos de Montcasau

 

Comenzamos el descenso por un agradable sendero entre pinos y pastos, que pronto pierde pendiente para depositarnos en un primer rellano. El sendero continua claramente, hasta llevarnos hasta el primero de los estanys de Montcasau, el cual rodeamos por la derecha.

 

Lagos de Montcasau

 

 Lagos de Montcasau

 

Lagos de Montcasau 

 

Nos llamará la atención el enorme caudal que desde un agujero en la roca alimenta el lago. Se trata de la salida del canal subterraneo que viene desde el Lago de Colomers.

 

El camino continúa bajando, hasta llegar al segundo de los lagos, donde existen dos cabañas cerradas. El sendero continúa justo en el extremo derecho de la presa, por un terreno mucho más inclinado y suelto. Esta zona es muy húmeda y estamos rodeados de la densa vegetación del bosque de Loserón.

 

Debemos ir atentos a las señales para encontrar el mejor camino. Perdemos una gran altura en corto espacio de tiempo, sin embargo, finalmente llegamos al fondo del valle cubierto de grandes pinos. A partir de aquí solo tendremos que seguir la pista que, en suave descenso se va alejando del cauce del rio.

Salimos del pinar y llegamos a un cruce de pistas. Tomamos el ramal de la izquierda, que tras una pronunciada curva vuelve a encarar la bajada del valle, que a estas alturas apenas tiene pendiente y está cubierto de grandes pastizales.

 

Cruzamos un primer puente sobre una torrentera, y un segundo, sobre el Río Reneules, coincidiendo con el comienzo de un nuevo bosque. A partir de este momento encaramos la última bajada importante de nuestra ruta.

 

La pista traza cuatro curvas muy cerradas antes de encarar la última recta, que nos conduce a terreno ya conocido; la pista que el primer día nos llevó desde Pont de Ressec a Pont de Rius. Solo nos resta girar a la derecha y retroceder hasta el aparcamiento, que se encuentra a escasos minutos, para dar por finalizada esta ruta circular alrededor del Montardo.

 

El Montardo, al final del tour

 

TEXTO: Hermano Mero

FOTOS: Hermana Cabra y Hermano Mero.

A DON FRANCISCO GINER DE LOS RIOS

 Gracias a "Gato" de Sistema Central por recordarme esta poesía... Por lo demás, sobran las palabras:

Como se fue el maestro,
la luz de esta mañana
me dijo: Van tres días
que mi hermano Francisco no trabaja.
¿Murió? . . . Sólo sabemos
que se nos fue por una senda clara,
diciéndonos: Hacedme
un duelo de labores y esperanzas.
Sed buenos y no más, sed lo que he sido
entre vosotros: alma.
Vivid, la vida sigue,
los muertos mueren y las sombras pasan;
lleva quien deja y vive el que ha vivido.
¡Yunques, sonad; enmudeced, campanas!

Y hacia otra luz más pura
partió el hermano de la luz del alba,
del sol de los talleres,
el viejo alegre de la vida santa.
. . . Oh, sí, llevad, amigos,
su cuerpo a la montaña,
a los azules montes
del ancho Guadarrama.
Allí hay barrancos hondos
de pinos verdes donde el viento canta.

Su corazón repose
bajo una encina casta,
en tierra de tomillos, donde juegan
mariposas doradas . . .
Allí el maestro un día
soñaba un nuevo florecer de España.


Baeza, 21 febrero 1915.
Antonio Machado

PEGUERINOS Y LOS PINARES LLANOS CON ESQUÍS

PEGUERINOS Y LOS PINARES LLANOS CON ESQUÍS

Con el nombre de Pinares Llanos se conoce al amplio valle, recorrido por el curso alto del Rio Aceña, enclavado entre los montes Escurialenses (la parte mas suroccidental de la Sierra de Guadarrama), y la parte más oriental de la Sierra de Malagón.

Dicho valle, al que se accede desde el cercano pueblo de Peguerinos (Avila), como su propio nombre indica, es de suaves relieves y conforma prácticamente un altiplano que da cobijo a una enorme masa forestal.

La extensa red de pistas, construidas a comienzos de los años 70 a iniciativa del ingeniero-jefe del Distrito Forestal de Ávila durante aquelllos años, D. Javier Delgado Ubeda, unido a los desniveles y relieves poco exigentes y a la protección que para la nieve supone la cobertura arborea, hacen de toda esta zona muy atractiva para la práctica del esquí nórdico.

Como inconvenientes, que como en todos los ámbitos siempre existen, destacan, en primer lugar que para poder esquiar en Pinares Llanos tendremos que escoger días de recientes y abundantes nevadas, dado que la orientación sur del valle y su relativamente modesta altua (aproximadamente entre los 1.400 metros y los 1.903 m de Cueva Valiente, máxima elevación de la Sierra de Malagón, hacen que el deseado elemento no abunde todo lo que quisieramos... Claro que si lo pensamos, esa misma desventaja la tendremos prácticamente en toda la Sierra de Guadarrama, y por desgracia, cada vez de forma más aguda.

En segundo lugar, es de destacar que este rincón en principio tan idílico, es terreno favorito de motoristas y quads, lo que está provocando, ante la desidia y dejación de funciones de las Administraciones Públicas, una más que evidente degradación de laderas y senderos, literalmente destrozados por estas maquinas. Y todo ello, por no hablar de la contaminación acústica que provocan.

Por último, y como otro punto negativo tendríamos el estado de la, no hace muchos años, estupenda red de refugios que cubría estas tierras, que sin ninguna duda era la mejor de la Sierra de Guadarrama. Por desgracia, aquellos que, por la desidia y los elementos no se encuentran en ruinas, gracias a los guarros y vándalos, se han convertido en auténticos basureros inutilizables.

Sin embargo, nada de todo esto es razón suficiente para dejar de disfrutar del espectáculo de Los Pinares Llanos cuando se cubren de nieve.

Las posibilidades sobre esquís de fondo en esta zona son innumerables, pero hoy nos limitaremos a proponer una ruta de escasa dificultad y muy adecuada para inexpertos, dada su poca longitud (11 km), poco desnivel (220 m aprox.) y ausencia de tramos técnicos, subidas o descensos pronunciados.

Para llegar al punto de inicio tendremos que acercarnos hasta Peguerinos (cruzando, si venimos de Madrid, el Puerto de la Cruz Verde y el de La Paradilla). Una vez en el Pueblo, desde la misma plaza mayor, tomamos la carretera que se dirige a los Pinares, en dirección al Puerto de Guadarrama y al de Malagón. En unos cuatro km tenemos que dejar esta carretera y tomar una pista asfaltada, que en pocos minutos nos deja a la entrada del camping de Peguerinos, al lado del cual podremos aparcar nuestro coche. Por cierto, si las condiciones para esquiar son buenas, o sea que esta todo bien nevado, tendremos que contar con que para llegar hasta aquí es posible que nos hagan falta cadenas, o incluso que tengamos que abandonar el vehículo antes.

Los esquís podemos calzárnoslos nada más cruzar una verja con valla de piedra con el cartel de coto privado de caza. Nada más cruzarla comienza la pista que seguiremos durante buena parte de nuestro recorrido. Al principio por una gran pradera rodeada de pinar, y algo más tarde, ya dentro del mismo.

Subimos suavemente por pinar cada vez más frondoso hasta el embalse de Cañada Mojada, y siguiendo siempre por la pista nos internamos en el valle del Arroyo Chuvieco. En un momento dado la pista gira a la derecha dejándonos ver el tupido fondo del valle y más a la derecha la imponente mole de Cueva Valiente.

Poco después llegamos a una preciosa pradera con una fuente a la derecha de la pista, y aproximadamente un km después por fin alcanzaremos el Collado o Alto de la Gargantilla. Hasta aquí habran sido unos cinco kilómetros. Nos encontramos justo a los pies de Cueva Valiente, a cuya cima sube trabajosamente y con bastante más inclinación de la que hasta aquí hemostenido, una pista que nace en el mismo collado, pero que se queda pendiente para mejor ocasión.

Continuamos la pista, mientras seguimos ganando altura, hasta que, a algo más de un km encontremos una desviación a mano izquierda. Cogemos esta desviación, bastante más estrecha y en claro descenso. Si bien la dificultad es prácticamente nula, en caso de que la nieve no sea abundante conviene que vayamos con cuidado, dado que el firme no es muy bueno y abundan las piedras. En cualquier caso, será una agradable y tranquila bajada, a media ladera de la loma que durante la subida pudimos contemplar a nuestra izquierda.

Al cabo de 2 km, desde el último cruce, la pista nos situará sobre la loma. Justo en este punto encontramos una nueva encrucijada,  donde debemos girar a mano izquierda, lo que nos situará en una pradera de más que respetables dimensiones. Este es el punto más conflictivo de la ruta, dado que, como es lógico, la pradera estará cubierta de nieve y el trazado de la pista oculto por la misma. Para continuar tendremos que atravesar el llano en dirección sur, hasta dar con la continuación de nuestro camino, que continuará su descenso, hasta llegar a un nuevo cruce, en el que otra vez tendremos que decantarnos por el ramal de la izquierda.

Estamos muy cerca de la cola del embalse de cañada mojada, que desde aquí se ve perfectamente. Solo tenemos que remontar un breve repecho para reencontrar la pista que usamos durante la subida. Desde aquí unicamente tenemos que seguir las trazas de nuestros propios esquís, que nos harán volver, por terreno ya conocido, hasta el punto de inicio de la excursión. En total la ruta nos habrá llevado unas dos horas, dependiendo, claro está, del ritmo al que hayamos ido.

Texto y fotos: Hermano Mero

III MARCHA POPULAR NAVAFRÍA-EL NEVERO

III MARCHA POPULAR NAVAFRÍA-EL NEVERO

El pasado domingo 11 de Febrero se celebró en los alrededores del Puerto de Navafría la tercera edición de la, de momento, única marcha popular de esquí nórdico en todo el Sistema Central, y allí, para disfrutarlo y contarlo, estuvieron la Hermana Cabra, y el Hermano Mero.

La marcha, organizada por el Club Bajo Cero, reunió a más de 80 personas, de todo color y pelaje, casi el doble que en las anteriores ediciones de la marcha, según nos comentó David Iturralde, presidente del club... Y hablando de la variedad de los asistentes; os recomiendo leer el artículo aparecido en Desnivel... Ja, ja, ja... Que verbo el del redactor, que me hace sentir a veces, como  si hubiera participado en una expedición al ártico en la que solo faltase la banda sonora de "Al filo de lo imposible", y otras en una verbena con chotis incluído. En cualquier caso, lo mejor del artículo es la clasificación que hace de participantes:

  • "Correosos cuarentones": Mas que cuarentones eran jubilados, eso si... MUY correosos... Ni sufrían, ni padecían. Alguno se hizo el circuito, entre idas y venidas, un par de veces, y todavía tenía ganas, en la linea de llegada, de seguir dando vueltas con los esquís, "para no quedarse frios"... Por dios, que envidia.
  • "Jovenes treintañeras": ¿¿¿ Donde estaban???, o en su defecto, ¿donde miraba yo, que no las ví? Yo juraría que, la inmensa mayoría pasaba de los los cuarentt....aasgflasdlfjlsdjf.... Vale, treintañeras.
  • "Parejas estables": Imagino que nosotros competíamos en esta categoría, en cuyo caso creo que quedamos los primeros.
  • "Adolescentes no contaminados por el virus del snowboard". Creo que al salir vi alguno, pero mucho me temo que a la hora a la que un servidor llegó a la meta, ellos ya llevaban una horita tomando cervezas.
  • "Algun niño de menos de ocho años" Aqui no haré bromas, no sea que la liemos. Si, efectivamente los había.

  

También es digna de mención, la anectoda de la señora diciendo al ganador: "Lo suyo no vale porque fue corriendo; hay que ir tranquilamente, a su ritmo"... Creo que con comentarios como este, habría que añadir una nueva categoría de participante, ¿VERDAD JOAQUÍN?, ja, ja, ja....

En fin, volviendo al tema en cuestión; el circuito previsto era el mismo descrito en otro artículo de HM&HC, es decir un total de 22 km, contando con la ascensión al pico del Nevero. Sin embargo, dadas las condiciones meteorológicas, nadié llegó a hacer cumbre, por  lo que el recorrido se vió reducido a 17 km, con la nieve más bien justita y algunas "calvas" importantes, que propiciaron alguna que otra aparatosa caída, aunque sin consecuencias graves.

Por lo que respecta a nosotros, pues no quedamos en mala posición (calculo que entre los 20 primeros), aunque no se trataba de una competición como tal, y por lo tanto no se contabilizaban tiempos ni orden de llegada. En cualquier caso, achaco esos buenos resultados al acierto con la alimentación elegida para el evento; comida dietética y barritas energéticas variadas... de jamón y lomo ibérico, de cecina de León y queso picón de Cuenca... Solo faltó la bota de vino.

En fin, que por si no se nota, nos lo pasamos muy bien, y encima en el sorteo de material posterior a la marcha nos tocaron unas mallas de deporte y un peto de esquí de fondo... así que, a ver si en próximos años, y si el cambio climático nos deja, podemos vernos en las siguientes ediciones.

Texto: Hermano Mero

Fotos: Hermana Cabra y Hermano Mero

LAS IGLESIAS MOZÁRABES DEL SERRABLO

LAS IGLESIAS MOZÁRABES DEL SERRABLO

En el curso medio del río Gállego, en las cercanías de Sabiñanigo, o lo que es igual, en pleno corazón del viejo Aragón, podemos encontrar uno de los más singulares conjuntos de arquitectura religiosa de todo el Pirineo, son las llamadas iglesias mozárabes del Serrablo.

Realmente su origen, cronología, catalogación y estilo  son bastante inciertos, existiendo posiciones encontradas; por un lado la de aquellos que, en base a una estructuras y esquemas constructivos muy similares a las del románico-lombardo (cuyos ejemplos más conocidos son los de Sant Climent de Taull, y las fotografiadisimas iglesias del valle de Boí o Andorra), defienden un origen, en torno al siglo XII, común al del resto de templos de este estilo. Por otro lado, los que defienden su “mozarabismo” basandose en la existencia de ciertos elementos, tales como arcos de herradura, portadas con alfiz, frisos de baquetones, ventanas ajimezadas o tríforas, comunes con otros templos cristianos de la península construidos, bien bajo dominio musulmán, o bien por maestros cristianos provenientes de territorio musulmán.

Según los seguidores de la segunda postura, estos templos habrían sido erigidos más de un siglo antes de lo sostenido por los defensores de la teoría contraria, por lo que nos encontraríamos ante algunos de los templos cristianos más antiguos de la península.

De lo que no cabe duda es de la personalidad propia de este conjunto de iglesias, que fueron estudiadas y dadas a conocer por primera vez, en el primer tercio del siglo XX, por R. Sanchez Ventura, Francisco Iñiguez y Gomez Moreno.

Su estructura general suele ser de una sola nave, de pequeñas dimensiones, con un ábside rectangular (en los casos más antiguos) o semicircular rematado por bóveda de cuarto de cañón. La techumbre de la nave, al contrario, acostumbra a ser plana, aunque en algunos casos, esta se sustituyó posteriormente por bóveda de medio cañón. En el exterior se observa la cubierta a dos aguas, y destaca la esbelta torre, a modo de minarete. La zona más profusamente decorada suele ser el ábside (en los de tipo semicircular), en el que encontramos un friso de baquetones sobre arcadas ciegas. En el resto del cuerpo del edificio los únicos elementos decorativos serían las pequeñas ventanas ajimezadas (también usuales en la torre) y la puerta de entrada, a menudo rematada por un arco de herradura enmarcado en un alfiz. 

San Pedro de Lárrede podría considerarse como el ejemplo más importante del conjunto, que es completado por los más modestos templos de San Bartolomé de Gavín, Otal, Susín, Oliván, San Juan de Busa, Satué, Isún, Ordovés y Lasieso, todos ellos situados en la vertiente izquierda (oriental) del río Gállego, entre Biescas y Sabiñanigo y fácilmente accesibles por carretera, la mayor parte de las veces estrecha, pero en buen estado para turismos.

Este tesoro arquitectónico, divulgado y restaurado en gran parte por la Asociación de  “Amigos del Serrablo”, es por tanto de obligada visita para cualquier amante del arte, o para aquellos que sin serlo tanto, son asiduos visitantes del Pirineo y desean no solo subir sus cumbres sino conocer algo más de su historia y de la cultura de sus habitantes.

Para facilitar la visita, todas las iglesias están debidamente señalizadas como parte de la ruta  del Serrablo, así que ya sabéis que hacer con ese día libre que os queda en vuestra próxima escapada al Pirineo... No valen excusas.

Texto y fotos:  Hermano Mero

Plano de situación: Asociación de Amigos del Serrablo

LA UE ADVIERTE A ESPAÑA SOBRE SAN GLORIO

La Unión Europea ha advertido a las autoridades españolas que deben asegurarse de que cualquier proyecto en el puerto de San Glorio no causará perjuicio a la integridad de las zonas incluidas en la Red Natura 2000. En respuesta a una pregunta del eurodiputado español de Los Verdes, David Hammerstein, sobre la propuesta de modificación del Plan de Ordenación de Recursos Naturales (PORN) del espacio “Fuentes Carrionas y Fuente Cobre-Montaña Palentina” para construir en la zona una estación de esquí, el comisario europeo de Medio Ambiente, Stavros Dimas, ha recordado que este enclave de la cordillera cantábrica "fue designado por las autoridades españolas zona de especial protección de aves (ZEPA) con arreglo a la Directiva sobre aves y lugar de interés comunitario (LIC) con arreglo a la Directiva sobre hábitats. Además, la zonas ha sido también declarada reserva natural por la legislación regional".

"De acuerdo con la información disponible, en la actualidad están en curso los procedimientos administrativos para la modificación del Plan de Ordenación de Recursos Naturales de la zona protegida “Fuentes Carrionas y Fuente Cobre-Montaña Palentina”. Esta modificación del plan prevé la posibilidad de crear estaciones de esquí en zonas que se juzguen compatibles para otros usos, previa realización de una evaluación de impacto ambiental", indica Dimas, que especifica que desconoce aún cómo será el proyecto de esta estación de esquí.

Tras estos detalles, el comisario europeo incide en que "hay que señalar que el artículo 6, apartados 3 y 4, de la Directiva sobre hábitats establece salvaguardias sustantivas y de procedimiento respecto a los planes y proyectos que puedan tener un efecto apreciable en un lugar de Natura 2000. Las disposiciones de este artículo constituyen una forma de régimen de desarrollo que determina las circunstancias en las que los planes y proyectos con efectos perjudiciales pueden ser autorizados". Y subraya como, en concreto, el artículo 6, apartado 3, establece que "cualquier plan o proyecto que, sin tener relación directa con la gestión del lugar o sin ser necesario para la misma, pueda afectar de forma apreciable a los citados lugares, ya sea individualmente o en combinación con otros planes y proyectos, se someterá a una adecuada evaluación de sus repercusiones en el lugar, teniendo en cuenta los objetivos de conservación de dicho lugar".

De acuerdo con este procedimiento, Dimas asegura que "las autoridades españolas tendrán que analizar los efectos de la estación de esquí, cuando se determine tal proyecto, sobre el lugar Natura 2000". "A la vista de las conclusiones de la evaluación, y supeditado al cumplimiento de la secuencia de trámites que se determinan en el artículo 6, apartado 4, de la Directiva", concluye el comisario europeo, "las autoridades nacionales competentes sólo se declararán de acuerdo con dicho plan o proyecto tras haberse asegurado de que no causará perjuicio a la integridad del lugar en cuestión y, si procede, tras haberlo sometido a información pública". "Espero que la respuesta de Dimas haga desistir a los promotores del proyecto", ha comentado el eurodiputado David Hammerstein tras conocer la contestación, "pues ningún estudio de impacto ambiental realizado con criterios científicos podrá garantizar que este valioso espacio de la cordillera cantábrica no se verá afectado por una estación de esquí en San Glorio". En este caso, el eurodiputado de Los Verdes ha recalcado que, como establece el artículo 6 de la Directiva de hábitats a la que se refiere el comisario, "esta obra no se podrá realizar mientras no se demuestre que existe una necesidad imperiosa de llevarla a cabo por el interés general y que no hay otras alternativas, pero está claro que unas pistas de esquí no justifican esta excepción extraordinaria a la legalidad europea".

Noticia extractada del PORTAL DEL MEDIOAMBIENTE

PICARESCA DE LADRILLO

Todos sabíamos que, una vez destrozadas nuestras costas, ahora el objetivo era enladrillar y alicatar nuestras montañas, en pos del interes general... Del interes general de tres o cuatro, por supuesto, que se están llenando los bolsillos con la connivencia y el apoyo de los politicos, sean del partido que sean. Y ahí están los casos de la alcaldesa de Marbella (que debe ser la más inocente entre un millón, porque es  a la única que han pillado), o el del PSOE de Aragón, que a pesar de autoproclamarse defensor de la democracia y la participación ciudadana, ha votado en contra y en bloque contra la tramitación de la Ley de Protección de las Montañas de Aragón, solicitada por iniciativa popular de 30.000 firmantes y numerosas organizaciones ecologistas y montañeras... Debe ser que estos paladines de la libertad estan interesados en la opinión de los ciudadanos solo cuando los ciudadanos dicen lo que ellos quieren. Mientras tanto prefieren irse de comilona con el Holding ARAMÓN para ampliar estaciones de esquí y urbanizar todo lo urbanizable (y también lo no urbanizable)

 

Pero, ¿que ocurriría si a este escenario, donde se unen política corrupta, ladrillo desaprensivo y montaña domesticada sumáramos la picaresca más racial y genuina, al más puro estilo del Buscón?... Pues pasen y lean, porque esto no tiene desperdicio.

ENGAÑOS Y GRUAS EN EL PIRINEO

 El 10 de diciembre de 1998, Mariano Fanlo se presentó ante el secretario municipal de Yésero (Huesca). Llevaba con él 19 carnés de identidad y empadronó a todos sus titulares. De una tacada. Para ahorrar tiempo, porque las elecciones municipales se celebraban seis meses después. El pueblo tenía y tiene unas 40 casas, 62 empadronados (más los 19 de golpe) y sólo 12 vecinos que residan todo el año. Fanlo, policía nacional jubilado, había dejado Yésero hace más de 40 años y vive en Jaca (a 40 kilómetros), pero al empadronar a su familia y amigos salió elegido alcalde en la lista del Partido Popular. Obtuvo 40 votos, 17 más que Vicente Campo, del Partido Aragonés Regionalista. Sin los 19 nuevos votantes, hubiese perdido por un voto en 1999 y por 15 en 2003, cuando revalidó su mandato.

Fanlo dirige el pueblo enfrentado con parte de los vecinos permanentes y ha impulsado un Plan de Ordenación Urbana para levantar 589 casas en el corazón del Pirineo. Ahora, el Tribunal Superior de Justicia de Aragón ha ordenado revisar el censo y dar de baja a los empadronados aquel frío día de diciembre de 1998 y que van al pueblo a votar. Fanlo ha rehusado hablar para este reportaje.

Santiago Ripoll llegó a Yésero desde Barcelona hace 10 años. A finales de los años 80 había comprado una casa en este pueblo mínimo del Pirineo. El enclave, de empinadas calles y casas de piedra, se asoma al valle del Sía. Barranco abajo ruge el agua cristalina y la nieve cubre a menudo el puente que lleva hasta el pueblo. Ripoll, de 51 años, se hartó de su trabajo como ejecutivo. "Si viviera en Barcelona, ahora estaría muerto", afirma.

Cuando llegó, Yésero tenía poco atractivo, pero hoy tiene todas las oportunidades para un alcalde con iniciativa. El pueblo está a 10 kilómetros de la estación de esquí de Panticosa y a otros tantos del Parque Nacional de Ordesa. Así que el alcalde promovió una revisión del Plan General de Ordenación Urbana para construir 589 casas. El pasado 15 de febrero, la Comisión Provincial de Urbanismo le denegó el permiso por decenas de motivos como la falta de zonas verdes o de justificación.

Ripoll está convencido de que su oposición y la de otros vecinos, junto a la sucesión de recursos judiciales que ha presentado, fueron fundamentales para frenar el plan. Y también de que eso le costó que el alcalde le quitara el bar del pueblo, que intente derribar su vivienda y que su mujer se fuera de casa. "He tenido un coste personal muy alto, porque me he opuesto y en un pueblo tan pequeño eso es muy duro". La paralización del plan le ha costado a Fanlo y a los que empadronó mucho dinero. Ellos eran en su mayoría propietarios de las tierras que iban a urbanizar.

El problema se repite en otros pueblos de la zona. El Gobierno de Aragón, del PSOE, promueve ambiciosas ampliaciones de las pistas de esquí. Pero el negocio no es tanto el esquí como el ladrillo. La prueba es que la empresa pública que promueve las pistas, Aramón, amplió la estación de Panticosa, pero sólo lo hizo a cambio de que el municipio le cediera 30 hectáreas para urbanizar.

Al calor del ladrillo han surgido denuncias como la de Yésero. Una vecina de Fago, Mónica Barcos, denuncia que su alcalde, Miguel José Grima, del PP, le impide empadronarse, pese a que es de allí y allí vive desde hace dos años. Barcos sostiene que Grima no quiere nuevos vecinos que le puedan desalojar del pueblo mientras 18 de los 31 empadronados no viven en el pueblo. El alcalde lo niega y asegura que no puede empadronar a todo el que lo pide si no cumple los criterios de residencia. Además, sostiene que detrás del intento de Barcos y otros vecinos por censarse hay un intento de "tomar el control del pueblo".

Estos conflictos están surgiendo ahora entre dos formas de vida. Los que protestan suelen ser gente llegada de fuera, como Miguel Ángel Molinero y Mónica Crespo, una pareja de treintañeros que llegó hace cinco años a Fago huyendo de Madrid; o Ramón, un albañil de Madrid que se estableció en Yésero junto a su familia. Ellos intentan proteger el paisaje y después de años allí se sienten con derechos. Enfrente tienen a los alcaldes y los habitantes de toda la vida. La mayoría abandonó los inhóspitos pueblos de las cumbres y van en verano y fines de semana. Sin embargo, consideran forasteros -así los llaman- a los que llegaron de la ciudad aunque son los que viven allí.

Ripoll explica que no se opone a cualquier urbanización, sino a las grandes urbanizaciones que están vacías casi todo el año: "Construyen segundas residencias que no se ocupan nunca, salvo en Navidad y en los puentes. Trabajo en un bar y sé que no dejan nada en la zona ni dan trabajo. Sólo ganan los constructores y los alcaldes. A cambio, fastidian el paisaje, que es el atractivo de la zona, y saturan la zona de coches y carreteras. Que construyan hoteles", explica en el coche, junto a Panticosa. Es jueves, la nieve es perfecta y en el aparcamiento recién construido en un desmonte para albergar 1.500 coches sólo hay una decena de vehículos. El argumento es espantosamente similar al que comienza a alzarse en la costa, ante la proliferación de segundas residencias.

A menos de un kilómetro está Francia. Allí todo está protegido. O los franceses saben algo que los españoles no saben, o viceversa. Se admiten apuestas.

(Reportaje aparecido en EL PAIS

UNA PERFECTA CONOCIDA

UNA PERFECTA CONOCIDA

Por no saber, no sabía que existía, hasta una de esas tardes "tontas", paseando por Madrid, una de esas tardes que entras en una librería y te pones a curiosear... Y fué allí, en un estante lleno de libros de poesías, de autores muy conocidos, poco conocidos, o perféctamente desconocidos, cuando la encontré.

Un pequeño librillo encuadernado en cartón azul, un tanto descolorido y con una flor de Edelweiss sobre un fondo de montañas nevadas. Su título, o mejor dicho títulos, en plural, puesto que se trataba de dos colecciones de poemas en un solo tomo, era: "Mi Edelweiss" y Horizonte". Su autora: Teresa Casas Güell. Lo abrí al azar, y comencé a leer para darme cuenta, inmediatamente, que esa persona de la que un momento antes no sabía nada, sentía y pensaba, en gran parte, de una forma muy cercana y familiar.

Me llevé el libro a casa, donde pude terminar de descubrir que esta barcelonesa era la "perfecta conocida". En cada uno de sus versos podían descubrirse fragmentos de una vida vivida, crecida y amada entre las montañas. Unas montañas formadas de roca y agua, de caminos y sudor, de esfuerzo e ilusiones, que van más allá de ser un mero paisaje, para convertirse en el otro protagonista, junto al amante perdido que dió sentido a una vida, y al hijo amado que volvió a llenarla. 

Esta es una de esas pequeñas perlas escondidas que alguna que otra vez, encontramos, casi por casualidad, casi misteriosamente... Os recomiendo este libro: os daréis cuenta, leyéndolo, de la sensibilidad y el amor que se desprenden de todas y cada una de sus páginas. Todo el sentimiento y la nostalgia de una mujer montañera, amante de la vida y de la muerte (la otra cara de ésta, que ella asume como algo inevitable pero no terrorífico). Mi Edelweiss remite, en fin, a esa pequeña flor, tan apreciada, tan buscada, símbolo de la pureza en su estado más elevado, homenaje de la naturaleza a la libertad, joya de las nieves, perfecta en su solitaria blancura nívea. Horizonte es lo que siempre perseguimos, collado tras collado, cima tras cima, sin alcanzar nunca.

A modo de ejemplo os dejo dos de las poesías que conforman esta colección, espero que os animen a buscar este libro, y si tenéis suerte y lo encontráis, quizás podréis conocer un estado del alma y de la conciencia que, quizá, sólo los montañeros y montañeras del mundo puedan comprender.

 

ASI REGRESO

Mírame. Quizá vuelvo

con la cara del animal sediento

que ha doblado recodos de cien caminos,

que ha cortado y subido atajos

buscando las sendas,

que ha dado mil vueltas.

Sí. Y en cada una

encontré un panorama nuevo.

Dejé atrás montañas y más montañas.

Crucé otros ríos, otros valles,

otras laderas...

Mira mis pantalones manchados,

mi mochila mugrienta.

Nada importa.

En la soledad de las montañas

se mira más alto y más lejos.

En la soledad se siente

el sielencio

y el olor de la tierra,

el crujir del verde,

la caricia de la brisa,

o el furor del tiempo revuelto.

Hasta el aliento del cielo, desciende

con la paz del sol o las estrelas,

o el ulular de las tormentas.

Sólo aquí, en paz o en lucha

con los elementos,

se puede ser con pureza , un bohemio.

 

Vuelvo cansada, rota y sucia.

También sedienta.

Pero, nada importa.

Regreso con el alma limpia,

llena de savia nueva.

 

HE BEBIDO LA LUZ

 

He bebido la luz de todos los soles.

He gozado de las noches bajo las estrellas.

Tengo el rostro curtido por todos los vientos,

los pies encallecidos de andar por todas las piedras.

Y en mi corazón, de animal humano,

aún tengo sed,

sed de beber los senos de la madre:

la sed inagotable de sorber la vida

en la madre tierra,

de sentir su paz, bajo el azul del cielo.

No sé

si en mis manos rotas verás

- rotas de peso viejo, perdido ya

en algún recodo de mi vida -

huellas de heridas de arañar la roca.

Traigo surcos de sanre seca,

pero traigo en ellas, y en la boca, y en el pelo,

olor y sabor a tomillo y a romero.

Y en el alma, - rota ayer,

pero recién nacida hoy -

en el alma traigo una copla nueva.

No tengo nad, nada soy

más que un animal sediento,

con sed insaciable de montaña,

sin más tesoro que el azul sereno,

la luez y el viento,

el sol y las estrellas.

Y la tierra. La tierra recia de la sierra,

con la canción del agua entre las peñas,

con el arroyo y el árbol,

la flor y la piedra.

¡ Porque es mía el agua pura de los manantiales,

mío el aire limpio que regenera !

¡ Todo es mío, que lo llevo dentro!

¡Mío! Y es más grande que el universo.

 

"Mi Edelweiss - Horizonte ". Teresa Casas Güell. Editorial. Agrupación Hispana de Escritores. Colección La Otra Palabra