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HERMANO MERO & HERMANA CABRA

La Catedral (Cap des Freu)

"La Catedral" es un nombre muy común en el mundo del buceo para denominar formaciones submarinas espectaculares, que normalmente están asociadas a cuevas y cavidades. La primera que afronté, en Gran Canaria, me pareció impresionante, y ésta que pude conocer el pasado mes de septiembre en Mallorca no se queda corta (aunque reconozco que los juegos de luces canarios son más impresionantes, quizá porque el día que descendimos en Mallorca el cielo estaba muy encapotado y en consecuencia, disminuía la visibilidad).

Quiero resaltar, por cierto, que esta inmersión en La Catedral de Cala Agulla (Capdepera, Mallorca), muy tradicional y conocida por los aficionados al buceo, NO ES en la que perdió la vida un submarinista el pasado 12 de octubre, al quedar atrapado sin aire suficiente. El accidente no se produjo aquí, sino en otra galería de la misma cueva, una cavidad dificilísima, sólo apta para buceadores expertos, y que presenta un fondo limoso que dificulta enormemente la visibilidad (causa más que probable del desgraciado suceso), conocida como la J-1.

Se parte normalmente del puerto de Cala Ratjada, enfilando en dirección noreste hacia la zona situada entre Cala Agulla y Es Cap de Freu. La Catedral es una caverna de espectaculares dimensiones (la galería "normal" es de 80 metros de largo y se encuentra a 15 metros de profundidad) y hermosos contraluces. Sobrecoge sobre todo la entrada, muy amplia y apta para que en ella permanezcan los menos experimentados. El descenso no tiene nada de particular, pero es más que conveniente evitar los días de mar de fondo, ya que el reflujo incomoda en la entrada y salida del barco (yo me puse malísima y un compañero salió despedido hacia el mar cuando intentaba acceder a la barca, ya sin botella, después de la inmersión).

En la zona pueden encontrarse meros de grandes dimensiones (vimos uno de manto verde manchado tan grande como los que pueden encontrarse en alguna reserva marina), algunas morenas que se esconden en la rocalla a la entrada de la cueva, los inevitables sargos y un gran número de castañetas. Nosotros permanecimos durante 50 minutos en los alrededores de la cueva, también penetramos un rato en sus profundidades, pero lo dicho, se trata de una inmersión que no reviste peligro alguno a menos que uno se introduzca en la otra cavidad fatídica, mucho más estrecha, limosa y de.., ¡150 metros de longitud!, que desciende hasta los 20 de profundidad y en la que, repito, además de la titulación requerida para este tipo de inmersiones, hay que contar con una excelente preparación en espeleobuceo.

Milagro en La Catedral (Capdepera, Mallorca)

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